Ha pasado más tiempo de no tenerte con nosotros que el tiempo vivimos contigo. ¿Qué se hace con ese huequito en el corazón que nos dejó tu partida?

IMG_6549Cuando hablas de viajes con viajeros, surgen miles de preguntas, una de ellas, quizás la más recurrente es: ¿Viajar con un perro?, las respuestas siempre eran:

  • Un día conocí a una pareja que andaba por el mundo con un perrito, pero yo nunca lo haría.
  • Hace mucho tiempo leí una historia de una familia que viajaban con mascota, ¡No se como lo hacían!
  • ¿Puedes imaginarte lo difícil que puede llegar a ser eso?
  • Wooopaaa, eso no cualquiera lo hace, debes de amar mucho al animal.

Todo eso y más lo fuimos escuchando a lo largo de 30 meses viajando. La realidad es muy diferente a como todos lo pintan. 

«Amor incondicional en tiempos de viaje»

Llevábamos 20 meses viajando solos, dejando que todo fluyera, sin preocuparnos por nada más que por nosotros, y un día de repente la conocimos a ella. Estuvimos conviviendo únicamente 2 días con aquellos cachorritos, y ese tiempo fue suficiente para flecharnos, en especial uno de ellos, fue irresistible ver ese par de ojitos color miel y esa colita que no dejaba de moverse ante cualquier cariño.

Gus me lo preguntó -¿La adoptamos?- Por mi mente pasaron miles de cosas, muchas dudas y también un poco de miedo, algo muy dentro me decía que dijera que no, imaginaba mil situaciones en las que viajar con un perro no era una buena idea; pero en cuanto cargue a esa cachorrita y me lleno de lengüetazos, ni siquiera lo dude, lo único que pude decir fue SI ¡ADOPTEMOSLA!….A partir de ahí el viaje cambio en su totalidad, ya no podíamos dormir en cualquier hostal, ahora había que investigar ¿En qué lugar aceptaban perros?.IMG_0292Ya no podíamos tomar cualquier tour, ahora teníamos que preguntar y casi rogar para que nos dejaran llevarla con nosotros. Ya no nos aceptaba cualquier host en Couchsurfing, ahora solo convivíamos con personas «PET FRIENDLY». ¿Acampar? Eso se volvió una odisea, teníamos una carpa pequeña y lograr dormir 3 seres vivos en esa mini casita de campaña, con calor y maletas se volvió insoportable, pero el simple hecho de pensar en abrir la puertita y que ella pudiera escaparse no era una opción, así que nos tocaba aguantar y dormir como se pudiera.

Fueron muchos cambios de golpe, en cada situación complicada por la que pasábamos, solo podíamos pensar en la facilidad con la que antes viajábamos y que simplemente en ese momento estábamos atados a llevar a nuestra cachorra las 24 horas, los 7 días de la semana con nosotros. Algunas otras veces llegamos a pensar en que tal vez todo hubiera sido más fácil si ella no viajará con nosotros; pero ese pensamiento no duraba ni un segundo, al instante de ese caos mental, volteábamos a verla corriendo por todas partes, con esa carita de felicidad y una sonrisa escondida que solo nosotros sabíamos identificar, era en ese momento cuando todo se nos olvidaba, y solo dábamos las gracias de estar con ella.

Después de unos meses entendimos que lo que estaba sucediendo era algo mucho más sencillo: estábamos atados de amor por Vilca.2X8B6323Habíamos pasado unos días en el Lago Titikaka, Vilca tuvo su primer encuentro con un cochino y algunas vacas, las persiguió hasta que se cansó, el cochino intentó morderla pero ella era muy hábil para permitírselo, cuando por fin se cansó llegó con una pareja de gringos que comían un sándwich y puso esos ojos de perro triste y movió la cola.

Yo veía a lo lejos como ellos agitaban los brazos en señal de que se fuera, pero ella no quería hacer caso, siguió observandolos por un largo tiempo hasta que consiguió lo que quería: un pedazo de su comida… ¡Era muy persistente!2X8B0618Aún me acuerdo que ese mismo día Gus y yo estuvimos platicando de la conexión que se puede hacer con un animal, por lo menos yo había tenido otro perrito por muchísimos años, pero jamás había conectado de la misma forma que con Vilca, para mi otro perrito (Dodger) estaban mis papás, ellos sí que sabían cuando algo le pasaba… Y Vilca nos tenía a nosotros y ella siempre sabía decirnos cuando algo estaba mal.

En aquel tiempo nos encontrábamos en Bolivia,  a punto de llegar a La Paz, pensábamos mucho en lo cerca que nos encontrábamos de nuestro objetivo: Ushuaia, nos preparábamos para las siguientes fronteras, nos habían dicho que Chile era un país muy complicado para cruzar con perros, y nos hacíamos la gran pregunta: ¿Cómo pasar esa frontera y no tener tantos problemas?, hacíamos cientos de planes de fotografías con Vilca en el Salar de Uyuni. Nuestro idea de llegar con ella al fin del mundo no era un opción, era algo obvio, algo que iba a suceder.Al llegar a La Paz, no instalamos en la casa de Alfredo, él tenía dos perros que consideraba «agresivos» tenía miedo de que trataran mal a Vilca, así que cuando llegamos a su casa la limitamos mucho a no andar por ahí olfateando, preferíamos tenerla cerca de nosotros para evitar algún encuentro con los perritos de Alfredo. Esa primera noche jugamos con ella, recuerdo que me mordió las cintas del tenis como era su costumbre, recuerdo haberla abrazado para dormir. Al día siguiente amaneció desanimada, pero comió bien. La familia que nos hospedaba había planeado un día de tour por el centro histórico de La Paz, preparamos a Vilca para salir, pero ella no quiso caminar, la regresamos a la casa, y al entrar se fue directo a la puerta del Poderoso para descansar ahí, no entendimos porque quería dormir dentro del carro, pero no le dimos mucha importancia y la dejamos ahí con su comida y agua mientras nosotros nos íbamos con la familia.

Ahora que lo pensamos detenidamente, creemos que Vilca consideraba como su casa al vochito y simplemente ese día de tanto malestar quería descansar en donde ella se sentía más cómoda: En el Poderoso. IMG_8564Todo el día de tour estuvimos con mucha ansiedad por regresar con Vilca, pero no queríamos desanimar a la familia que con muy buena onda se había ofrecido a llevarnos a pasear, así que nos aguantamos y sacamos nuestras mejores sonrisas. Cuando llegó la hora de volver a casa, corrimos a buscarla y ahí estaba ella, tranquila y dormida en la misma posición en la que la habíamos dejado, en ese momento supimos que algo no andaba bien.

Empezamos a llamar a veterinarios, nadie respondía, a pesar de que no era muy tarde por alguna extraña razón nadie nos quería ayudar, las horas iban pasando y ella no se recuperaba, la crisis se apoderó de nosotros y terminamos haciendo llamadas a veterinarios de México para que alguno nos dijera qué hacer. La comenzamos a ver poco a poco peor, entramos en desesperación, los veterinarios 24 hrs de Bolivia jamás nos respondieron, los pocos que contestaron nuestras llamadas no quisieron atendernos, fue el peor momento que vivimos en el viaje, todo se fue saliendo de nuestras manos, queríamos salir corriendo con ella a buscar a ayuda pero ¿A dónde podíamos ir?, las horas siguieron pasando, y ella se fue poniendo cada vez más mal y así, sin ninguna razón en específico ella dejó de respirar.

No sabemos qué fue lo que le paso, le podemos dar mil vueltas al asunto, sacamos miles de conjeturas, nos llenamos de hipótesis y nuestra memoria retrocedió semanas atrás para intentar descubrir síntomas que tal vez habían sido invisibles en su momento. ¡Nada de eso funciono! Vilca se había ido, sin ninguna razón aparente, lo único que sabíamos era que ese amor tan grande que le teníamos dolía mucho. De Bolivia tenemos una nebulosa, recordamos muy pocas cosas, lo más fuerte y doloroso que tenemos presente es ese día que ella nos dejó. Hasta la fecha el dolor no se ha ido, perdimos a una integrante de la familia, perdimos a alguien que fue muy importante para nosotros, perdimos a una cachorrita que se convirtió en nuestra hija.Después de muchas lágrimas y con muy poca energía continuamos el viaje, y como una mala costumbre siempre que llegábamos a un lugar nuevo pensábamos en ella, en cómo la hubiera pasado ahí, en lo feliz que habría sido con nosotros. -¿Te la imaginas corriendo en este parque?, -¡Uy, Vilca hubiera sido feliz en esta montaña!, -¿Crees que nos hubiera aguantado el paso en el treeking?, -¡Cómo habría saltado en esta playa!, -¿De qué tamaño crees que hubiera terminado de crecer?IMG_0389Extrañamente a pesar de su ausencia ella siguió viajando con nosotros. Recordábamos cómo nos babeaba la cara por las mañanas para que la llevaramos a hacer pipí, extrañabamos ver esos ojos de emoción cuando tocaba subirse al Poderoso para viajar, extrañabamos sus ladridos, la extrañabamos a nuestro lado, caminando, cruzándose entre nuestros pies, extrañabamos su locura al ver perros de la calle…¡Los amaba!IMG_7351De vez en cuando me pregunto ¿Qué hubiera pasado si ese día que la conocimos y nos ofrecieron adoptarla hubiéramos dicho que NO?. Tal vez nos habríamos ahorrado mucho dinero en veterinarios, habríamos ahorrado en pagar hoteles Pet Friendly, no hubiéramos gastado dinero en croquetas, ni en certificados médicos y tal vez hubiéramos podido visitar muchos más lugares. Pero nada de eso importa, ni por la tristeza que nos da pensar en que ya no está con nosotros, ni por el dolor tan fuerte que nos causó su partida, ni por el hecho de haber vivido el día más triste del viaje cambiaríamos de respuesta, definitivamente sería un SÍ por siempre.

Estamos más que agradecidos de haber podido viajar con ella, de que nos hubiera adoptado a nosotros como sus humanos. Fue muy corta su estadía en este mundo pero a nosotros nos cambió por completo y nos dejó tanto amor que nos durará toda la eternidad.Estamos agradecidos con que haya sido ella la que llegó a nuestras vidas, que haya sido ella la que nos enseñara a amar de esa forma a los animales, que haya sido ella la que nos enseñó ese amor incondicional. Estamos felices de que esa cachorra se haya cruzado en nuestro camino y ahora estamos convencidos de que viajar con un perro ha sido la mejor decisión que pudimos haber tomado.2X8B6479*Pd.- A Vilca la incineramos, era impensable el hecho de abandonar su cuerpo en Bolivia, así que nosotros continuamos viajando con sus cenizas hasta el fin del mundo. Y fue ahí, en el famoso Estrecho de Magallanes, fue justo ahí en el final de nuestro viaje, donde dejamos parte de nuestra Vilca. La dejamos ahí porque ella había nacido para viajar, y sabemos que esas corrientes la llevaran mucho más lejos de lo que nosotros podremos imaginar.2X8B5392

Comments:

  • Brenda

    1 abril, 2016

    Un articulo muy lindo y lleno de muchas emociones en lo personal que hizo que se me apachurrara mi corazón. El amor de nuestras mascotas es el más puro y genuino. Ella fue su ángel y lo será siempre. Un abrazo chicos.

    Saludos

  • Rafael

    2 abril, 2016

    que hermosa historia !!!! me llego en lo mas profundo de mi corazón .

  • TONI

    2 abril, 2016

    chicos, NOMADARTE son unos grossos, Vilca es su angel Y los protege en todos sus viajes por el mundo

  • Eli

    21 junio, 2016

    Es la primera de sus historias que leo y debo decir que me pareció hermosa … ustedes son una pareja muy inspiradora … sigan así … saludos

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