Es momento de contarles la crónica de nuestro frustrado intento de cruzar a Belice el día de ayer.

photo

Todo comenzó muy temprano, nos despedimos de nuestros couchsurfers de Chetumal, Francisco, Aquiles y Alicia que dicho sea de paso nos trataron de manera fenomenal y ayudaron a preparar nuestra salida de México. Estábamos hospedados en casa de Paco. Desde facebook decíamos adiós a nuestro país, sin saber lo que nos esperaba.

Obstaculo #1: Hacer maletas.

Aunque la carga se supone seria más ligera (después de la perdida de nuestra bolsa negra) el hacer maletas y acomodar las cosas para que quepan en el Vocho es toda una odisea,  ya lo dice el dicho: «Nadie sabe lo que tiene hasta que lo acomoda en un Vocho». Así decidimos hacer una limpia de cosas inútiles y mandarlas de regreso a casa. Mandar algo desde Chetumal al interior de México tiene un grado de complicación extra pues hay que llevar a la aduana cada cosa y que sea aprobado, así que si vienen a Chetumal y piensan comprar fayuca china en la free zone,  lo mas seguro es que si no lo traen puesto les cobren el impuesto y pierdan los pesos que creían ahorrar. Desde la central camionera (después de un intento fallido en DHL) logramos mandar el paquete, nos sorprendió la amabilidad de las chicas de la aduana que se reían de cada pendejada que deciamos para suavizar la situación.

Tiempo perdido: 1.45 min

Fayuca Oriental auspiciada con Jackie Chan

Fayuca Oriental auspiciada con Jackie Chan

Obstáculo #2: El Vocho.

Como saben nuestro viaje lo hacemos desde un Vocho que poco a poco y por el maltrato sufrido por sus anteriores dueños tiene sus achaques, ya nos ha dejado sin frenos, varados en avenidas, con plagas de insectos, inundaciones, etc. Pareceria que los siete jinetes del apocalipsis van viajando con nosotros jajaj. En fin teníamos que cambiar los empaques para no sufrir inundaciones y colocar de una vez por todas las calcomanías de nomadarte.

Tiempo perdido: 3.15 min

Volkswagen Nomadarte

Volkswagen Nomadarte

 

Obstáculo #3: Las compras de pánico.

Ahora entiendo como se sienten los turistas cuando vienen a México, comprando botellitas de agua purificada de su país y mil cosas más, pues dice la leyenda que en México no existen o son de muy mala calidad. Bueno nosotros sufrimos compras de pánico. De manera rítmica abrí la que creía seria mi última bolsa de papitas Chips picantes extra salsa habanero con limón. Así también se oyó de la voz del Gustavo:

-Este es mi último gansito del año, te voy a extrañar!

acto seguido de devorar al pastelito chocolatoso hecho en México.

Tiempo perdido: .35 min

Las últimas papitas

Las últimas papitas

 

En fin, lo que sería una salida madrugadora para Belice se transformo en prisa. Tomamos camino hacia Belice. Ni bien habían pasado 10 minutos y estábamos cruzando el puente, una lluvia intensa que nublaba nuestra vista llegó. (notese como la primer señal). Perdidos sin una idea del protocolo para cruzar llegamos y nos regresaron por que debíamos fumigar el carro (se dieron cuenta de las hormigas cruzó por nuestra mente). Perdidos un poco pero orientados por chinos de la free zone pudimos fumigar el vocho. El costo 5 USD.

Ahí van los tres amigos de nuevo con el vocho para cruzar la frontera. Esquivamos un bache pero caímos en una piscina ( un bache muy muy grande) y al pasarlo un sonido surgió. Estábamos arrastrando algo. Nos estacionamos y dimos cuenta que era un trozo de metal (señal número dos) que salia del fondo de nuestro coche.Nos regresamos, le seguimos. Vamos a cruzar ya estamos aquí!

Comenzamos a bajar las cosas del coche para pasar por aduana. «El Mundo de Inglés de Disney» no nos había preparado para esto, un raro acento de inglés, el nerviosismo, la ropa mojada, el peso de los topers un cúmulo de factores nos llevo a la escena de nuestro toper de salsas un una oficina esperando a un supervisor (tercera señal definitiva).

Ya no nos queremos ir de México hoy, si no van nuestras salsas nosotros tampoco. Falto la escena del mexicano patriótico que tira una botella de «Salsa Valiente» en cámara lenta en el piso como protesta, mientras un perro pastor alemán en super cámara lenta ladra, pero nadie puede hacer nada para evitarlo. En fin en realidad era de noche, el vocho estaba mal y estábamos muy cansados, así que decidimos posponer un poco la salida hasta que todo se arreglara. Así que después de explicar con un: «Ai guana bak tu mi pais, plis» pudimos volver al «poderoso» y regresar, Aquiles nos hospeda y desde aquí escribo, lo primero que hicimos esa noche fue revivir el ciclo de compras de pánico disfrutando de unos tacos de barbacha.

Hoy dedicamos el día a reparar el Vocho en el mejor taller mecánico de Chetumal  el Taller Fili, que le metieron prisa en la reparación por si alguna vez se les ofrece les pasamos la dirección ( Camelias 217-A entre Juarez y Belize, Chetumal Quintana Roo. Tel. (983) 833 06 82)

El cirujano a cargo del corazón del Vocho

El cirujano a cargo del corazón del Vocho

Mañana vamos a Belice a continuar la travesía, en algún sitio leí que: «un viaje perfecto no puede ser una aventura» ahora lo entendemos.

 

 

 

Comments:

Sorry, the comment form is closed at this time.